Reconocida por sus cueros excepcionales, la casa K.Jacques está en el origen de las míticas sandalias Saint-Tropez, creadas en 1933 por Jacques Keklikian. Adepto a las líneas sobrias, ha desarrollado una variada gama de atrevidos clásicos, perpetuados durante tres generaciones.
Planos, con tacón o con cuña, los zapatos K.Jacques colaboran con la prêt-à-porter y la alta costura. Estas piezas, sinónimo de lujo, ligereza y creatividad, se fusionan artísticamente con las siluetas de los creadores del universo Pepa.